P.- En anteriores
novelas no has querido ubicar geográficamente el desarrollo de la historia, o
bien —como en el caso de La amenaza— has optado por ambientarlas en el futuro.
¿Por qué en esta ocasión están perfectamente definidas las ciudades y los años
en que se desarrolla?
R.-Para contar la
historia de August se requería, a mi parecer, un detalle mayor del entorno que
le rodea. De esta manera, al lector le resulta mucho más sencillo imaginar a
los diversos personajes con los que se va cruzando a lo largo de su vida.
P.-August. Pecado
mortal tiene la peculiaridad de estar narrada en primera persona. ¿Es como
sueles escribir?
R.- Esta es la
única novela, por el momento, que tengo escrita de esta manera. Tiene su
explicación, y es que toda la historia del protagonista está narrada por el
mismo, desde su único y particular punto de vista. Además, esto hace que el
lector se sienta totalmente parte de la historia, como si fuese el confidente
de August.
P.-¿Cómo definirías
tu forma de escribir?
R.-En una palabra:
dinámica. Mi intención es siempre que la lectura enganche y, para ello, además
de una buena historia (esto ya va con gustos), creo que es importante que los
acontecimientos no se detengan. No me gusta pararme a contemplar el paisaje,
sino entrar en una carrera frenética que no dé tregua alguna ni a los
personajes de la novela ni al lector.
P.-¿Qué parte de ti
está reflejada en la novela?
R.- Yo creo que
todos los escritores dejamos pequeños retazos de nosotros mismos en cada
personaje, al igual que de las personas que conocemos y de las situaciones que
nos hemos ido encontrando. Concretamente,
en August. Pecado mortal va buena parte de mis experiencias y el
protagonista está basado en una persona de carne y hueso.
P.- La novela
parece tener una cierta influencia del escritor Vernon Sullivan (Boris Vian).
¿Hasta qué punto es así?
R.- Quizá por
algunas situaciones pueda surgir esa semejanza, como el comportamiento racista
que existe, aunque aletargado, en el pueblo natal del protagonista, también en
parte por la descripción de la vida en una pequeña localidad norteamericana de
mitad de siglo, ciertas rarezas en los comportamientos, la presencia del entorno
casi como un personaje… Me han comentado varios lectores que se habla en
ciertos momentos sobre que los hechos transcurren en Nebraska, pero que la
localización de la obra tiene más que ver con las novelas negras de Boris Vian.
Bueno, es parte de lo oculto de la novela, no puedo anticipar cuál es la
verdadera localidad en que transcurre. Si bien hay paralelismo, mi obra en
particular no contiene escenas especialmente escabrosas, ni descripciones
exhaustivas de los diversos crímenes que aparecen a lo largo de esta historia.
Y mientras que Boris Vian deja unos finales abruptos, duros, impactantes, yo he
procurado dejar finales abiertos a la interpretación del lector.
P.-¿Qué pretendes
mostrar con esta novela?
R.- Pretendo entretener;
ese es siempre mi objetivo. Es cierto, sin embargo, que en este caso también
intento que el lector «juzgue» al protagonista. Me gustaría que se pusieran en
contacto conmigo, tras la lectura, para que me dijeran qué opinan de él.
¿Merecía estar en el corredor de la muerte? ¿Era una víctima?
P.-Finalmente, ¿por
qué razón debería alguien leer este libro?
R.- Bueno, no todo
el mundo debería, tal vez. Solamente aquellos dispuestos a acompañar a un
condenado a muerte durante sus últimos minutos. Los lectores que quieran
sorprenderse, que deseen ver la complejidad de la mente humana. Las personas
que no teman viajar a la Norteamérica de mediados del siglo pasado, y descubrir
los oscuros secretos que pueden existir en una pequeña familia de pueblo.
Más sobre "August, pecado mortal" en la web de M.A.R. Editor http://www.mareditor.com/narrativa/August_DavidJSkinner.html