Descubrí al escritor Kalton
Harold Bruhl en los tiempos en que Josefina
Beneitez, directora de Radio
Exterior de España, me dejó dirigir un programa, al que titulé Sexto Continente. (El Sexto Continente
es el español, un continente que se
extiende a través del planeta). Le concedí a Kalton el III Premio de
relatos Sexto Continente, sobre Hiroshima; el IV, de Relato Negro, porque
vislumbré al genio. No le conocía nadie. Poco después, ganó el Premio Centroamericano de Novela, que
refrendaba que era un autor de lujo. Otro ganador del Premio Sexto Continente
es Arquímedes González, también
Premio centroamericano después. Publicamos en Ediciones Irreverentes dos
fantásticos libros a Kalton Harold Bruh
que la prensa especializada ni se molestó en echar una mirada, porque estaban
ocupados con los coleguis, los anunciantes, y los libros de las 3 empresas más
grandes, que pueden tener detalles: El
último vagón y La
mente dividida. En realidad, tampoco pareció importarle demasiado al
distribuidor, a los libreros, y a los lectores. ¿Quién tiene tiempo para mirar
una joya cuando te ofrecen 90.000 productos al año?
¿Lección de
todo esto? Cuando veas un libro gilipollas en los medios de comunicación, en
las listas de más vendidos, y a su autor sacándose fotos con Leticia Sabater y
entrevistado en Tele 5, ni te inmutes. Sigue con tu obra, todo eso que ves será
devorado por el tiempo, convertido en compost, abono para las plantas. Sólo la
obra permanece. Quizá hayas publicado en Ediciones Irreverentes, Periódico
Irreverentes o M.A.R. Editor y ni aún así le conozcas, aunque sepas de
memoria de qué tratan El tiempo entre costuras y Sombras de Grey. Pues bien,
piénsalo un momento. ¿Por qué no has leído las obras de autores como los que
menciono? Ya, demasiada oferta, quizá.
Hay
editoriales que colocan los libros por palés en los supermercados, otras editoriales
descubrimos a autores que han venido para quedarse para siempre... Aunque, en
el fondo, da igual: todo es vanidad. Felicidades, Kalton. Y quien haya leído a
la Dueñas y a Bucay en lugar de a ti, que se joda.
No hemos
venido aquí a hacer amigos, sino a dejar frutos para la eternidad. Aunque al
leer esto te rías. Hay realidades que al no entenderse provocan una sonrisa.
Miguel Angel de Rus
La mente dividida http://www.edicionesirreverentes.com/narrativa/Lamentedividida.html
III Premio Sexto Continente de Relato, http://www.edicionesirreverentes.com/SextoContinente.html
IV Premio Sexto Continente de Relato, http://www.edicionesirreverentes.com/SextoContinenteNEGRO.html
VII Premio sexto Continente de Relato http://www.noticiasirreverentes.com/Asesinatos/Asesinatos.html